Mientras Wanda Nara avanza con una millonaria demanda, la actriz mostró su versión más relajada y enamorada. Sonriente, con look de seda y abrazos familiares, la China compartió imágenes del vuelo privado que encendieron las redes.
La historia volvió a estallar . La China Suárez aterrizó en Buenos Aires acompañada de Mauro Icardi y sus hijos, y lo hizo en medio de la máxima tensión con Wanda Nara, quien presentó una medida judicial con una multa de ¡100 millones de pesos!
Pero lejos de esconderse, la actriz eligió mostrar su felicidad. Desde su cuenta de Instagram, publicó una serie de fotos íntimas tomadas durante el vuelo privado que la trajo desde Estambul: sonrisas, abrazos y gestos de calma que contrastan con el huracán mediático que la rodea.
“La felicidad”, escribió junto a las imágenes que, en pocas horas, superaron los 127 mil “me gusta”.
Un viaje en pijama de seda y con amor en el aire
En las primeras fotos se la ve radiante, con un conjunto de seda verde oliva estampado con cebras. El detalle no pasó desapercibido entre sus seguidores, que inundaron los comentarios con frases como “Reina”, “La más linda”, “Brillás”.
En otra postal, la China aparece abrazando a Amancio, su hijo menor, en una imagen tierna que derritió a sus fans. Entre mascarillas faciales, auriculares y bandejas con frutas frescas, las fotos muestran una versión íntima y cuidada, con estética de revista pero tono familiar.
La foto más comentada: abrazada a Mauro Icardi
El álbum cierra con la imagen más fuerte de todas: la China y Mauro Icardi abrazados, sonrientes y vestidos al tono. Sin texto ni aclaraciones, la foto habla por sí sola.
Un gesto simple, pero con un mensaje potente: unidad en medio del escándalo.
Mientras tanto, las cámaras la esperaban en el Aeroparque y los titulares hervían con la novedad de la medida judicial impulsada por Wanda Nara.
Guerra judicial y amor en el aire
Horas antes del aterrizaje, Wanda Nara había presentado una cautelar millonaria para impedir que sus hijas se vinculen con la actriz. Según su abogado, Nicolás Payarola, la medida incluye una cláusula de $100 millones si se rompe la orden.
La empresaria rompió el silencio con un mensaje a Intrusos:
“Las nenas lo pidieron, no yo. Fueron obligadas por el papá a pedir por la China”.
La respuesta de la actriz no fue con palabras, sino con fotos. Una secuencia cuidada y calculada, con sonrisas, miradas cómplices y una estética que, más que un álbum familiar, parece una declaración pública: “Estamos bien”.
Entre peluches, mascarillas y miradas cómplices
En una de las fotos, Magnolia aparece en la cabina del avión, con un peluche de Stitch en la mano, mientras observa a los pilotos. En otra, se la ve con una bata celeste del mismo personaje.
Son imágenes que muestran una escena de vida cotidiana, lejos de los tribunales y las polémicas televisivas.
Amancio, por su parte, sonríe con un buzo del Galatasaray, mientras el sol entra por la ventanilla. Todo en el mismo tono: calidez, familia y desconexión.
Un álbum que vale más que mil declaraciones
La China no habló, pero dijo todo con sus fotos. En pleno escándalo judicial, eligió mostrarse feliz, enamorada y serena.
Un mensaje directo a sus seguidores… y, quizás, también a Wanda.
